jueves, 5 de noviembre de 2009

Plundering desire

Ha nacido un nuevo blog, por así decirlo, lo que ha nacido es una implicación, una expecativa de algo más. Un compromismo para que, periódicamente, escriba algo y lo publique, un contacto, algo que reconforta, un vínculo, un lazo.

Como dice Felipe (no diré cuál, está claro quién), "euriak irakurtzen ez daki, liburuek euria uxatzen dute", por eso creo que escribimos, sí.
Escribimos para ahuyentar lo que nos asusta, lo que nos hace rompernos el cráneo, lo que nos impide dormir. Por eso escribimos, sí, para reafirmarnos, para sentirnos más seguros, para agarrarnos a los renglones y poder ver a través de la seguridad que ellos nos dan. Las palabras no escritas son efímeras, cualquiera puede olvidarse, acordarse mal, desde el momento en que salen nos transmiten inseguridad, no sabemos siquiera si nos han oído bien.

Escribimos, sí, para fijar las cosas, que no haya lugar a la confusión, sabemos que si alguien tiene dudas puede volver a las palabras, una por una si hiciera falta, y leerlas. Son para nosotros como unas pirámides de Egipto, unas catedrales medievales, algo eterno, algo que, creemos, el viento del tiempo no podrá barrer jamás.

Además, se lo damos al mundo para que
nuestras palabras sean leídas, para sentir que estamos acompañados, para sentir un vínculo, un lazo, un nexo de unión, para sentir que tenemos un manto protector. Sí, por todo eso escribimos, y por mucho más, pero pero siempre estará a la base lo que hemos dicho, sí, por así decirlo un sentimiento de soledad, o si se prefiere, una necesidad de compañia.

Después de esta introducción, creo que he de aclarar el por qué del título: algo que me gusta leer (Escuchar: leer con los oídos. Escuchar con los ojos: Leer. Oralidad, escritura, qué más da son casi iguales (platon es el ejemplo), aunque su pervivencia sabemos que no es bajo ningún concepto la misma, y ése es precisamente el objetivo del blog), algo que me gusta leer -repito para no perder el hilo-, son las letras de The Smiths, por ellas he puesto este título al blog. The boy with the thorn in his side es la canción que tiene el título del blog, y esta joya:

And when you want to Live
How do you start ?
Where do you go ?
Who do you need to know ?

Es algo que el año pasado, me llegó directamente a los sentimientos. O al corazón. O a donde se quiera que estén. Me dieron unos renglones, unas letras con las que ahuyentar, alejar lo malo. Unas líneas que me dieron refugio y me hicieron sentir agarrado, me dieron compañía. Fueron una hoguera, me dio calor, ahuyentó las posibles fieras. En pocas palabras, cumplieron la función que les hemos asginado antes. La misma por la que escribimos blogs.